Ir al contenido principal

Sentido en Letra.



Buen día que suena a otra lucha incansable por resistir. No como un secreto por encontrar o un enigma por resolver, más como una herida que sangra y no sana. Un no sé cómo ni para dónde agrio. Estoy rendida a los pies de mi estómago y no entiendo para qué la cabeza pregunta tanto si se pone a llenarme el pecho de mocos. Estas soledades son inquietantes porque termino regada y entonces me encarto con la gente que hay en mí. No podría aborrecerlas, son tan hermosas todas como yo misma, me acarician con sus observaciones, tanto inteligentes como impulsivas. Me mantiene en pie de lucha reconocerlas y me abstengo ahora de implicarme más allá. Quiero compartir pero mi entrega no merece la angustia, rayando los cristales y retándome a ser yo misma para encontrarme con rotas ganas de agarrar. Negra y tranquila, tostada y al tiempo recargada por el sol, en quien me baño y a quien invoco a brillar más fuerte cada vez. En mi contexto machista hablarle al masculino como arquetipo de fuerza es creerme una copia de algo así como un ser clasificado y orientado. Y creyéndome me creo mientras me creen algo entre líneas como si aliteración fuera igual a alteración y este sentido tuviera algo de letras.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Sustento de tierra dulce

Imagino que soy sin este cuerpo un saber ser, un absoluto que no se pregunta por lo absurdo y mucho menos por lo abstracto. Esa imagen que no es táctil me sabe a humo y sube hasta lo que sabemos es la atmósfera que nos cobija la vida. Me separo de lo que soy para intentar amar sin nudos que me nublen la posibilidad de crecer e intento romper esa fina capa de oxígeno que nos contiene. Ingenio una vía hacia la estrella más cercana y me solidarizo con un calor que ya no siento, pero aún lo recuerdo, y ahora más que nunca resisto. Más y allá comienza la fusión con ese fuego que enceguece y del que no quedan formas ni ataduras terrenales. Saber y sentir son pasados de lo que ya esta nada en la que me he convertido no tiene el más mínimo reflejo. Dispersa en lo lácteo de mi camino me he tropezado con los límites del universo conocido: la materia oscura, el túnel hacia otra dimensión que no requiero porque ya no existe la curiosidad con la que comencé este viaje, no existo yo, así en masculin...

El tiempo se ha quedado dormido

El tiempo se ha quedado dormido, insolentemente. El tiempo se ha ido despacio, sin alarmas, sin necesades. Horas, años, días, meses, siglos, inventos humanos que soportan en sí la existencia de aquella dimensión. Tiempo falso, tiempo libre, tiempo muerto... ¿Exactitud? Solo los compromisos saben recordar aquella palabra. Un día más, un día menos, en el mismo lugar, con la misma sensación. El tiempo se ha quedado dormido, Insensiblemente. Tras mi ahogo entre las horas, tras la espera de que pase la vanidad de un lunes o un jueves quizá. Y vienen "fechas" que me recuerdan que el tiempo ha pasado. Pero no delante de mí, no ha ido caminando en el roce de mi piel, pues yo sigo acá y para mí, el tiempo se ha quedado atrás. Y hay días que dicen que estás creciendo, hay años que dicen que ya has acabado con una etapa de tu vida, hay horas que dicen qué será de ti, pero también hay días (y estos abundan) que no dicen nada. Es por esto que me consume la necesidad de leer, escuchar, ve...
No seré miel, pero tengo algo de dulce y pegajoso. No seré agua, pues no he sido transparente. No soy del todo negra y por eso tampoco seré carbón. No vengo a salvarme, pues entiendo que no tengo salvación. Voy a caminar hasta que me canse, después dormiré sobre la pradera del placer.  Verdosa, amarillenta y silenciosa, porque he manchado mi alma. Ya no seré alma, porque de la tierra soy. Y no seré tierra tampoco, pues aquí me tienes civilización. Y cuando despierte y deje de escuchar esa canción, allí estarás con esa sonrisa que me llena de aliento y me recuerda que viento y ceniza soy.