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RIMA IV

Becqer fue uno de los poetas que cambió mi vida. Pero bueno no voy a hablarles de mi relación con la poesía, hoy quiero compartir un poema de este señor que cada vez que lo leo me sorprende más. No me explico cómo hace para decir tantas cosas, tan profundas, reales y sublimes en un solo poema muy bien estructurado. Es un poema crítico y al mismo tiempo romántico, es, a mi parecer, muy emotivo y reconfortante.
Y depronto logre acercarlos un poco a ese género tan anticuado y poco leído, que a mi me llena de buenos momentos.

No digáis que, agotado su tesoro,
de asuntos falta, enmudeció la lira;
podrá no haber poetas; pero siempre
habrá poesía.

Mientras las ondas de la luz al beso
palpiten encendidas,
mientras el sol las desgarradas nubes
de fuego y oro vista,
mientras el aire en su regazo lleve
perfumes y armonías,
mientras haya en el mundo primavera,
¡habrá poesía!

Mientras la ciencia a descubrir no alcance
las fuentes de la vida,
y en el mar o en el cielo haya un abismo
que al cálculo resista,
mientras la humanidad siempre avanzando
no sepa a dó camina,
mientras haya un misterio para el hombre,
¡habrá poesía!

Mientras se sienta que se ríe el alma,
sin que los labios rían;
mientras se llore, sin que el llanto acuda
a nublar la pupila;
mientras el corazón y la cabeza
batallando prosigan,
mientras haya esperanzas y recuerdos,
¡habrá poesía!

Mientras haya unos ojos que reflejen
los ojos que los miran,
mientras responda el labio suspirando
al labio que suspira,
mientras sentirse puedan en un beso
dos almas confundidas,
mientras exista una mujer hermosa,
¡habrá poesía!

Gustavo Adolfo Becqer

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